No puede ser que lo necesite tanto. Intento no pensar, pero no puedo. Está bien, a veces digo: lo odio, es igual que todos, me hace mal, no vale la pena... Pero en realidad lo necesito y mucho. No puedo estar lejos de él, no sé porque, pero para sentirme "bien" tengo que estar cerca, y si es posible, mirándolo, o hablándole. Además me sigue confundiendo, y es verdad que no quiero más esto pero no puedo estar lejos de él. Necesito tenerlo de alguna forma, y como de la forma que yo quiero no lo tengo, me conformo con su amistad. ¿Me conformo dije? No, no me conformo una mierda, pero no tengo otra opción. Siento que mi mente se divide en dos, una parte me dice: olvidatelo, no te merece. No sufras más por él, pensá en otra cosa, hay muchos chicos en el mundo, no tenés que ponerte mal. Él no es para vos. Y la otra parte me dice: pero es tan lindo, tan tierno, te trata re bien, le parecés linda, te mira... para mi, te quiere. ¿Y a quien le hago caso? Porque las dos tienen razón, aunque lo mejor para mi sería hacerle caso a la primera parte. Pero hay algo, algo de la segunda parte de mi mente que no me lo deja olvidar, pero ¿Qué es? Puede ser que me esté volviendo loca, o por ahi me estoy obsesionando un poco. O tal vez exagero. ¿Quién sabe? Si nadie me entiende ...